El joven que mató a dos manifestantes antirracistas es declarado no culpable

El joven estadounidense Kyle Rittenhouse, que mató con un rifle semiautomático a dos personas e hirió a una tercera al margen de manifestaciones antirracistas en agosto de 2020 en el estado de Wisconsin, fue absuelto este viernes durante un juicio muy seguido en Estados Unidos.

Los doce jurados declararon a Rittenhouse, de 18 años, «no culpable» de las cinco acusaciones que pesaban en su contra, incluyendo homicidio intencionado en primer grado, en el cuarto día de sus deliberaciones.

Rittenhouse, que se enfrentaba a una pena de cadena perpetua, afirmó haber actuado en defensa propia. Mientras se leía el veredicto, sollozó antes de salir rápidamente de la sala del tribunal.

«No quería matar a nadie, pretendía detener a la gente que me estaba atacando», dijo Rittenhouse durante su juicio, en respuesta a una pregunta del fiscal Thomas Binger sobre si su intención era asesinar a todas las personas contra las que disparó.

El incidente tuvo lugar en medio de enfrentamientos entre grupos de civiles armados y manifestantes del movimiento «Black Lives Matter» (Las vidas negras importan) en Kenosha.

Las protestas en Wisconsin surgieron después de que un agente de policía le disparara por la espalda al afroamericano Jacob Blake, que quedó parapléjico, el 23 de agosto.

Ese episodio provocó una ola de protestas contra la brutalidad policial con la comunidad negra, y dos días después, el 25 de agosto, Rittenhouse, mató en esa misma ciudad a dos manifestantes e hirió a un tercero.

El entonces presidente Donald Trump defendió a Rittenhouse, simpatizante del ahora ex mandatario, y rehusó reunirse con la familia del afroamericano Blake.

El juicio, indicativo de las divisiones en la sociedad estadounidense por el uso de armas, el derecho a la autodefensa y el movimiento antirracista Black Lives Matter (Las Vidas de los Negros Importan), fue ampliamente difundido en el país, y el fallo, como se esperaba, suscitó reacciones opuestas.

Agencias