Los extranjeros que se encuentran en el campamento migrante contiguo al puente Nuevo Internacional en espera de solicitar asilo político ante el gobierno de Estados Unidos, han revivido la esperanza de encontrar respuesta favorable con la nueva administración, ya que consideran que el presidente Trump actuaba con una política racista.
Mala experiencia
Gladys Cañas, presidenta de la organización no gubernamental Ayudándolos a Triunfar, que desde hace más de un año está apoyando a los migrantes varados en el puente, dijo que lamentablemente esa nueva luz de esperanza está animando a otros grupos de centroamericanos que ahora tratan de llegar a la frontera norte de México a probar suerte.
Cita que de poco más de dos mil personas que llegaron a congregarse en el campamento, hoy sólo quedan 500 en promedio, muchos han regresado cansados por tanta desventura, con miedo a sufrir por la enfermedad lejos de su tierra, de su casa.
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Ahora se les ha pedido a los que permanecen en el campamento, que no alienten a familiares o amigos a migrar a este país con historias de triunfo, sino hacerles ver la realidad que han vivido en su larga travesía a pie, pasando hambre, miedo, ataques de la delincuencia, el rechazo social, y luego más de un año concentrados en un espacio que no reúne las condiciones apropiadas para vivir.
Se busca que no propicien más la migración, la salida de más personas de su patria por buscar el llamado sueño americano, porque definitivamente no es algo tan simple y placentero, sino que hay mucho sufrimiento en este proceso.
