En este año sólo un grupo muy selecto del país podrá comprar en el Buen Fin que ahora va ser del nueve al 20 de noviembre. Se extiende mucho en esta ocasión con la finalidad de que más puedan aprovechar.
Trabajadores del gobierno en todos sus rangos, los maestros, clase política y empleados de Pemex son algunos ejemplos de personas que van a poder comprar. En realidad es una minoría en comparación con el resto de los mexicanos, asegura el empresario Rubén Treviño.
Esas personas “no han dejado de percibir su salario jamás durante esta epidemia, tienen muchas prestaciones, sueldos privilegiados y por si fuera poco les van adelantar el aguinaldo para que puedan comprar”, expresa.
MIRAR
Por esa razón su poder de comprar va ser importante y van acaparar toda clase de artículos, “mientras miles de mexicanos sólo serán espectadores” al no tener más remedio. Es lamentable la situación y muy triste que más de la mitad de México no podrá comprar a lo mejor ni en diciembre.
Es la realidad en México donde sólo unos cuantos podrán aprovechar las miles de ofertas que pondrán las empresas con el fin de atraer clientes, y saben que son tiempos difíciles donde deben promover todos sus productos para recuperarse.
“Ha sido un año marcado por muerte, dolor y tragedias además del desempleo y cierre de empresas que no podrán recuperarse. Saben que el Buen Fin sólo será aprovechado por un selecto grupo de personas en esta ocasión”, señala.
OPORTUNIDADES
Son oportunidades que cada año vienen pero en este 2020 las cosas no han salido bien para la mayoría de las personas y no podrán aprovechar. A pesar de los esfuerzos que hagan no es posible adquirir productos necesarios.
En esta era digital donde todos estudian a distancia, miles de niños requieren de un celular o tableta para poder estar en sus clases. Esos aparatos es lo que pondrán en oferta pero pocos tienen el dinero para comprar, “y a crédito ni hablar porque millones están en buró bien marcados por su historial económico”, asegura.
Electrónica, ropa, calzado y aparatos para el hogar son los productos más ofertados durante esas fechas.
RESIGNACIÓN
En tales circunstancias no queda de otra más que la resignación a espera de que vengan tiempos mejores, por lo pronto no se puede comprar más que lo elemental para sobrevivir. Cientos de negocios apenas van abriendo hace unos dos meses y no hay capital suficiente para invertir como en otros años.
Los medianos y pequeños comerciantes no tienen dinero para gastar tampoco, además de mucha gente sin empleo que están en peores momentos de sus vidas. No hay una fecha de cuándo podría venir la recuperación completa.
