Son los padres, no los directores quienes presionan el regreso a las clases presenciales

Son los padres de familia y no los directores quienes han tomado la iniciativa para promover el regreso a las clases presenciales, a pesar de la situación sanitaria y las carencias que se tienen en las escuelas, ya que en el afán de regresar a su antigua rutina de dejar a los niños para hacer sus actividades libres de responsabilidad, no valoran los riesgos.
El profesor César Noé Garza, líder del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación en Matamoros, informa que en muchos planteles los padres están presionando para que se abran las aulas con los cursos mixtos o híbridos, es decir, donde una parte de los alumnos acuden, otros siguen la clase de manera virtual.

Prudencia
La gran mayoría de los directivos escolares han tomado la decisión de esperar, ya que la Secretaria de Educación no les ha entregado los paquetes de materiales sanitizantes, de limpieza, como tampoco equipos para la toma de temperatura a cada alumno que llega.
Faltan además materiales para rehabilitación de los edificios, que han estado técnicamente en desuso por dos ciclos escolares.
Ahora que se ha dado a conocer que hay un sustento legal para proceder contra los directores que soliciten cooperaciones a los padres, ya que está prohibido, los directores prefieren esperar a que el Estado les haga llegar los recursos, pero las asociaciones a pesar de estar conscientes de la situación real del plantel, están pidiendo el regreso de los niños a las aulas.
La presión es porque se les dificulta pagar el servicio de internet, o sus hijos no disponen de un laptop o un buen celular para seguir la clase, aparte de que algunos tuvieron que reducir su horario de trabajo para estar al pendiente de sus hijos estudiando en casa, otros más no pueden tener un empleo fijo.

Calma
Sin embargo, César Noé considera que lo más prudente por ahora es esperar a que los menores sean vacunados, ya se está dando a conocer por parte del gobierno federal que se prepara la aplicación de la primera dosis a los adolescentes, es conveniente tener paciencia y continuar con el plan de estudio a la distancia.
En Matamoros, gracias a gestiones del sector empresarial, alrededor de mil menores hijos de trabajadores de las maquiladoras, fueron llevados a vacunas a Brownsville, con lo cual se ha iniciado la inmunización a este sector de la población.